Imagínate ver a uno de estos en tu espejo retrovisor.
Porsche dio a los conductores de Londres una gran sorpresa cuando envió por sus calles al ganador de Le Mans 2016, el carro se anduvo paseando temprano por la mañana en la vía pública, compartiendo calles con otros coches.
Webber, quien es oriundo de Australia, pudo hacer algo de turismo. La ruta lo llevó desde Park Lane al Támesis, pasando por los lugares más emblemáticos de Londres, como Piccadilly Circus, Trafalgar Square, el Parlamento británico y el London Eye. El 919 no está fabricado precisamente para ir por las calles de una ciudad, sea Londres o cualquier otra, aunque todo indica que el paseo resultó bastante bien.
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Si bien hubo una época en la cual los autos de carreras fabricados para las 24 Horas de Le Mans compartían algo del ADN con los de los vehículos carretera, hace ya tiempo que aquello dejó de ser así. El 919 Hybrid y sus similares están en la cima de la tecnología competitiva automovilística. Este Porsche, en concreto, está propulsado por un motor V4 turboalimentado de 2.0 litros que recibe una asistencia parcial de un motor eléctrico, energía proveniente de una batería de iones de litio, la cual recuperada energía de los frenos y del calor del escape.
El 919 Hybrid ha tenido un desempeño bastante exitoso hasta el momento. Ganó Le Mans en 2015, su segundo año de competición, y la edición 2016 una de las más dramáticas de la historia de Le Mans que se recuerden.
Porsche paseó su vehículo por Londres para promover una máquina algo menos exótica: su nuevo Panamera 4 E-Hybrid. Esta versión híbrida y enchufable del sedán de lujo sustituye al antiguo Panamera S E-Hybrid. En cualquier caso, conviene que no confundas el Panamera 4 E-Hybrid con el 919 Hybrid, y no vayas haciendo el loco por las calles y carreteras si tienes uno, porque ni el Panamera es un auto de carreras, ni tú eres Mark Webber.
